Un fin de semana
Creo que el sábado fue uno de los días más aprovechados de mi vida, porque me levanté a las 9 y me acosté a las seis de la mañana del día siguiente. Se trataba del día de campo hammon y yo no podía faltar a ese evento (estuvo casi todo el smial y gente de fuera incluso).
Finceleb nos organizó una gymkhana en el campo, y haciendo dos grupos (chicos contra chicas, como siempre), nos pusimos a buscar, corretear, golpear y pensar. El sol nos quemaba desde lo alto (excepto a Chii que supo quedarse a la sombrita). Resultado: yo con moreno Agrowoman.
Nos lo pasamos muy bien. Si queréis una crónica más detallado, Níniel lo ha descrito muy bien en su blog. Al final ganamos las chicas, como siempre, porque los chicos sois un desastre, jejeje.
La piscina de después fue genial, porque hacía mucho tiempo (en todo el año, eso seguro) que no iba a una. ¡Con lo que me gusta a mí el agua, que parezco una rana! Pasamos la tarde entre chapuzones varios, ahogadillas y jueguecillos acuáticos, porque yo al menos paré poco a tomar el sol. Era tumbarme y decirme alguien: qué, ¿a la piscina? ¿Me acompañas? Y ya estaba yo allí, claro.
Luego habíamos quedado en el bar de Fince, pero de todos los que estuvimos todo el día juntos aparecieron pocos (pero suficientes para pasarlo bien). Lo mejor fue que en el bar aparecieron una despedida de soltera ¡súper alborotadora! Casi al final, claro, se pusieron a cantar y no íbamos a ser menos. Incluso Eleder se arrancó con un Cara a Anor, y ellas respondieron cantando A Galopar. Hasta el final no nos dimos cuenta de que ¡era la despedida de soltera de Marta, la hermana de Finceleb! Incluso estaba la novia allí. Fue muy curioso.
A las tres todo decayó y algunos querían irse a casa, pero 6 de nosotros acaparamos el coche de Hideki (y Yuu fue en el maletero, os podéis imaginar el espectáculo) y nos fuimos a su casa, que estaba vacía y él amablemente cedió. Tras fotos diversas con las graciosas pelucas de Hideki, sacó el alcohol. Las pelucas eran dos, e Hideki con una parecía el actor secundario Bob y con la otra era clavado a Perico, Smeagol. A la sobrina de Chii le gustaron mucho. Y luego nos puso Meet the Feebles, una película muy friki de Peter Jackson, para la cual no tengo palabras. Es simplemente impresionante. Jamás vi una ida de olla así. Incluso algún personaje me sonaba a personas del mundo real... Total, que a las 5 y media más o menos, cuando terminó, nos fuimos a coger un taxi y nos volvimos a casa. Nada más que decir, que caí en la cama en redondo.
El domingo... Buf. No salí de casa para nada. Dormí hasta las dos y pico, y me levanté con tal dolor de cabeza por la resaca y en las costillas de las agujetas por nadar... Y yo me pregunto: ¿Por qué tuve resaca? En el bar de Fince me tomé tres fantas de naranja, y sólo un vaso de vodka con lima en el apartamento de Hideki. No lo entiendo. Una de las mayores resacas que he tenido (no suelo beber mucho, así que la resaca es algo desconocido para mí) cuando menos he bebido. Pues eso, postrada casi todo el día en la cama, jugando de vez en cuando a algo en el ordenador, vi también Los Goonies... Pero vaya, nada de nada. Tranquilidad absoluta.
Esa es la crónica de este fin de semana, que he disfrutado como una enana. ¡A ver cuando volvéis, Niniel y Elengaer, y os organizamos otra igual!